La tienda minorista J-List reportó que tuvo problemas para importar algunos videos, figuras doujinshi y otros productos de Japón a Australia, todos ellos orientados al público adulto.
Aparentemente, los artículos fallaron la inspección de aduana, por lo que fueron devueltos a su país de origen. Esto a raíz de las nuevas regulaciones que clasifican publicaciones, filmes, juegos de computadora, etc. que describan, muestren, expresen o toquen temas de sexualidad de modo que ofendan “la decencia y la propiedad generalmente aceptadas por adultos razonables” como traspasos a la moral pública.
Los lineamientos incluyen contenido con menores de edad en situaciones explícitas, abuso de sustancias, crimen, crueldad, violencia, actos terroristas, bestialismo, entre otros. El nuevo estatus de ilegalidad hace que los bienes, además de ser confiscados, sean acreedores a una multa e, incluso, su importación podría desembocar en juicio.
No es la primera vez que el gobierno australiano toma medidas para filtrar el anime y manga que llega a su territorio. Meses atrás, la librería Kinokuniya retiró algunos títulos por quejas de p0rnograf1a infantil… Leer más.
En general, conforme la industria crece en el mundo, el hentai y sus géneros están siendo cada vez más puestos en entre dicho… Leer más. Lo que a su vez ha provocado que los artistas japoneses reaccionen en defensa de la libertad de expresión… Leer más.
Fuente: J-List Blog